miércoles, noviembre 05, 2008

La vas a extrañar...

Así nomás me lo dijo.

Lo escuché con cierta perplejidad. Estaba armando alguna carpeta para irme a tomar el colectivo, tenía los dedos manchados de tinta, no me afeitaba hacía mas de cuatro días y las ojeras por la falta de sueño ya se habían institucionalizado en mi rostro. Le respondí casi automáticamente

- Estás totalmente en pedo.

Lejos estaba yo en ese momento, arribando al final de mi carrera universitaria, de pensar que algún día iba a extrañar a la facultad.

Puedo hablar de mi época, no sé como será el tema ahora en la Ciudad Universitaria, pero el anotarse para cursar, la inscripción en las distintas cátedras, todo significaba tiempo (y mucho).

En los primeros días de la carrera era increíble ver la cantidad que éramos, comenzando esa carrera que habíamos deseado. Recuerdo que en la primer clase de Dibujo, los docentes recorrían las mesas, nos iban señalando a algunos (entre ellos a mi) y nos hacían una pregunta condimentándola con un poquito de sorna

- ¿Sos Maestro Mayor de Obras?

Y los turros no erraban nunca. Pero no se daban cuenta por nuestras virtudes en el dibujo, sino porque casi todos los MMO usábamos el mismo lápiz mecánico Pilot 0,5.

Tuve que reaprender a dibujar, a mancharme los dedos con grafitos, acuarelas y pasteles. A sentarme en una plaza a hacer croquis del lugar y de la gente. El croquis es fundamental en la labor arquitectónica. Desarrolla la escala, la perspectiva y la distancia.

Hubo que aprender labores menos artísticas, pero igualmente complicadas, como viajar con la carpeta, el tubo portaplanos (y en ocasiones alguna maqueta de estudio) en el 160 ó en el 33.

Las materias "filtro" eran conocidas. Matemática II era el gran verdugo de la carrera, luego casi a fin de la cursada (nadie se explica el por qué ahí y no al principio) Legislatura de la Construcción era vista poco menos que como un tribunal inquisidor para nosotros.

Desde el inicio de la carrera uno notaba algo, yo al trabajar en una revista de arquitectura ya lo había percibido, pero ya en la facu lo tenía a la vista, y era lo siguiente. Los arquitectos escriben todos igual. Las indicaciones en los pizarrones de los distintos talleres parecían escritas por la misma mano ¿y qué hacíamos nosotros? imitarla, por supuesto. Era "nuestra" letra. Es la letra que tengo hoy.

Comenzaron las labores en equipo, y aquí empieza la facu que se extraña. El armar los grupos para desarrollar algún proyecto, el trabajar en conjunto, buscar un lugar para llevar los tableros durante las entregas y encerrarse, escuchar una y otra vez nuestra música (primero ponernos de acuerdo sobre cual oiríamos) hartarnos de comer siempre pizza o empanadas.

Luego el momento de corregir en el taller con las clásicas enchinchadas, indudablemente se llamarían así desde tiempos inmemoriales porque en todos los años de mi carrera jamás clavé ni una chinche. Los conceptos del profesor, el ver los proyectos de los otros grupos y comparar distintas soluciones para la misma problemática.

Y en oportunidades la locura llegaba a extremos hermosos (esa es la palabra justa) Una noche mientras preparábamos la entrega final de Diseño V (último nivel de diseño en la carrera), habíamos juntado los tableros en un departamento de un ambiente en José Bonifacio al 300 (Caballito). Para ese momento todas las paredes estaban con planos y dibujos varios pegados, con distintas variantes de diferentes sectores del proyecto. En el grupo éramos cuatro varones y una mujer. Esa noche la piba no estaba y nosotros mientras dibujábamos y escuchábamos radio armamos una pelota con restos de papel calco.

A eso de las dos de la mañana, en ese departamento (que estaba en un segundo piso) nos pusimos a jugar un partido, corrimos, gritamos, nos cagamos de risa (hubo algunas patadas también) y luego, transpirados, molidos, volvimos a los tableros de dibujo... suena a locura. Si lo fue, también la disfruté.

Terminaron los trabajos prácticos de las distintas materias. Yo cometí el error de adeudar algunos finales y dejarlos "para después". Pero como cuando se deja de ir a la facu también se pierde el ritmo de estudio, tardé bastante en darlos. Finalmente al ir a dar el último de todos (Construcciones III), terminé la parte escrita y esperé me llamaran para el oral. No comenté a la docente que era el último que daba, por las dudas. Empezó el oral y fui respondiendo las preguntas, hasta que en un momento la docente me dice Ok, ya estamos. Y ese fue el click entre ser un estudiante y ya haberme recibido. Sonreí y la miré.

- Usted es arquitecta? le pregunté

- Si. me respondió

A lo cual extendí mi diestra y le dije Deme la mano, colega

Luego, ya con la nota en mi libreta estaba en el patio principal, tomandome un café y observando a un chico que hacía croquis... indudablemente estaba en el primer o segundo año de la carrera. Lo miré y pensé cuanto te falta, hermano...

Pero al salir uno tiene la conciencia de algo diferente. La cadena de conocimiento pasa por ahí adentro, afuera dependemos de nosotros mismos para fortalecer lo que sabemos.


Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo
Universidad de Buenos Aires
Pabellón III - Ciudad Universitaria

Era cierto nomás. Te extraño

25 comentarios:

Irene dijo...

Si, tenes razon...a mi me pasa con el Instituto Sto Tomas de Aquino de San Martin cuando curse la carrera de Letras (la mitad),,,como se extraña el bullicio, las reuniones, los cafecitos para armar algun trabajo practico..Y de eso te das cuenta cuando ya no lo tenes ahi.

Luciano dijo...

Me encantó el relato che. Lo bueno es saber lo que se quiere, se disfruta más el camino.
Es cierto que todos los arquitectos tienen la misma letra.
Si es un aniversario, felicitaciones.

Zeb dijo...

Y yo me recibí hace un año y monedas y ya extraño a la mía!!

Esa cosa de ir a cursar y sentarse en el piso, pedir el café en el bar, hacer la fila para comprar los apuntes...los trabajos prácticos interminables...en el momento muchas veces se lo sufre, pero después, como se lo extraña!!

No sabía que los arquitectos tienen todos la misma letra...para mí eso pasaba solamente con los médicos (q más que palabras, escriben electrocardiogramas jeje)

Abrazo!

Chiru dijo...

el sábado pasé por ahí, andábamos boludeando con la familia...
la foto tuya, la favorece bastante...

Y sí, se extraña todo aquello que uno disfrutó mientras duró

GABU dijo...

PARAAAAAAAAAAAAAAAAA!!!!

ME QUIERO MATARRRRRRRRRR!!!!

IRENE: VOS TE RECIBISTE AHÌ???
YO TAMBIÈN!!!
Y fuì la mitad de la secundaria al colegio que està casi una cuadrita antes,ese que parece la casita de Tucumàn,shit!! Nu me acuerdo còmo se llama...

Chico es el mundo dicen,no????
jajajajajaajjajaaj

P.D.:Hoy por hoy,extraño hasta el Jardìn de Infantes lo aseguro...
Pasa el tiempo y las etapas de la vida a medida que van dejando atràs lo vivido parece que quisièramos nosotros acercarnos... :S

BESOTEP EN EL TIEMPO =(

Henrieta R. Hipo dijo...

Primero: ¡Qué lindo lo que escribiste! yo no voy a la FADU pero creo que sigue siendo el mismo problemón anotarse. Las carreras que se cursan áhí tienen algunos puntos en común con la mia, por eso entiendo PERFECTAMENTE cómo es ir cargada de cosas en el bondi, hacer croquis y más croquis, el desorden del trabajo en pleno proceso... estoy en todo eso y me falta TANTO!

Segundo: Irene, el Instituto Santo Tomás de Aquino que decís es el mismo que conozco yo o hay otro en otro San Martín? (¿?)
Qué pequeño es el mundo, a tres cuadras de mi casa no más... jeje

Besos!!!

Café (con tostadas) dijo...

Que linda forma de contarlo!

Es cierto, se extraña la facu a veces. Se extrañan los almuerzos, los campeonatos de truco, el ritmo de cursdo, tener la cabeza sólo para eso, los apurones para los parciales y los finales...

Y eso que mi carrera no me gustaba nada y por eso la cambié!

Claudia dijo...

Yo no terminé mi carrera ( aún).
pero entiendo lo que decis.
Se extraña. Y es mas. Siempre me aparece algún recuerdo de algun profesor, o alguna barbaridad contestada en un examen, o las horas apuradas en el buffet antes de rendir, cuando uno cree que no sabe nada y sabe mas de lo que cree.
Buen post!.

Anónimo dijo...

ES imposible no extrañar.
Demasiadas vivencias y tiempo que siempre se recordará con cariño.

Saludos!!!

Irene dijo...

GABU!! no me digas q fuiste ahi!!! yo no termine (me falto el ultimo año),,,pero tengo los mejores recuerdos de ese lugarrrr (el profe de filosofia especialmente jejeje). en esa epoca se daban las carreras de Letras y Literatura y el profesorado de Historia.
en q año fuiste???

JES, el profesorado esta en San Martin pcia de Bs As. No se si hay otro,,,che q casualidadddd q chico el mundo y mira como nos venimos a enterar!!!

Araña Patagonica dijo...

Todo de lo que uno reniega, en general despues lo termina añorando.

Yo extraño a mi Anormal Nro. 1 y cada vez que paso por ahi se me frunce el alma..

Me encanto el relato

Besos (te estas volviendo muy bocasucia, sabelo!!!)

ani. dijo...

Buenas! Entiendo parcialmente, porque no estraño tantas cosas de mis épocas de estudiante joven. Como me catalogo de estudiante perpetua, hoy es un esfuerzo menor pero constante. Acaso lo haré para sentirme eternamente joven?
Pasé para saludarte por los cien años del Globo, muy "esmerado" el festejo!

Blonda dijo...

Yo no la extraño ni un poco...si extrañara algo sería a mis compañeras, pero como hoy son mis mejores amigas, ni eso.Debe ser porque no seguí la carrera que hoy hubiera querido...no?

besos

Jen! dijo...

Me faltan años dentro del profesorado así que, por ahora veo lejana la posibilidad de extrañarlo.

Esta firma viene por el hermoso posteo de los 100 de mi amado Huracán :)

Saludos

Anónimo dijo...

Como usted sabe, yo soy del palo tecnológico, pero el sentimiento es el mismo, extraño todo eso a pesar de haber pasado ya... 15 años ( ufff, alguien tiene un cuchillo a mano ? ) y de haber sido en la UB. Mis mejores amigos están allá. Un abacho !

Notengo dijo...

hermoso. nos pasa a todos esa nostalgia de la facu (creo). qué lindos años! sí, de lo mejorcito que me pasó.
emocionante relato.
un beso.

Henrieta R. Hipo dijo...

JAJAJAJA
Irene en el Santo Tomás y Gabu en el Mariano Moreno???
JAAAA es genial esto, miren cómo nos venimos a enterar de estas cosas!!!

Irene dijo...

JES JAJAJAJAJAA!!! no t puedo creer!! y mira q nos hemos cruzado mil veces por la blogosfera...!!

INCREIBLE!!!!

Anónimo dijo...

Yo quiero extrañarla, pero me falta todavía...
Todas las facultades de arq y sus estudiantes somos demasiados parecidos. El relato es casi universal
Saludos

Irene dijo...

no posteo por unos dias pero igual estoy.

Erótika dijo...

saludos erótikos y poétikos, bye

Irantzu dijo...

Sabes que yo soy una obsesiva respecto a coleccionar recuerdos. O sea, siempre pienso que esto lo voy a recordar después.
El otro día en un par de horas libres que tuvimos, fuimos en bici con una compañera hasta el cementerio a sacar fotografías (yo), y conversamos, al salir nos sentamos en la cuneta a tomar un helado... y no sé... es una tontera pero sé que después voy a acodarme de cuando volví a estar en la Universidad, y son estas cosas las que voy a recordar...
Al final, somos añoranza.

r.- el corre ambulancias dijo...

yo no llegue a recibirme, tuve la suerte de empezar a laburar de diseñador antes de tener el titulo, y como no me gusto, deje de cursar

pero todavia sigo con el mismo grupo de amigos con los que estuvimos noches interminables haciendo entregas a base de cafe y dolina

extraño y mucho el tiempo que podiamos pasar todos juntos; viviendo en un quilombo de tiempo pero a su vez, mas relajados

Irene dijo...

Q poco gas q tienen algunos globos ultimamente...

Hurricane dijo...

irene: Y, como siempre, mientras estás metido solo pensás en terminar e irte...

luciano: Tengo un conocido que afirma que el camino ya forma parte de las vacaciones. Por eso la cursada se tendría que poder disfrutar como previa al título buscado.

zeb: Y todavía vas a ver (si es que ya no te pasó) que te despertás pensando en que te falta algún final. Otro para vos.

chirusa: A fuerza de ser honesto, la foto la tomé de la web y busqué una favorable. Si ya cuando yo cursaba estaba hecha bolsa, no quiero pensar como estará ahora.

gabu: Jejeje, y desde que nos conectamos a la red, mas chico todavía. Otros para vos!

jes: Sip, y que no te alcanzan las manos ni la amplitud de los brazos para sostener las cosas y cuidar que encima en el bondi no te afanen. Otros para vos!

café: Se extraña el vivir para eso, el encontrar en la facu gente diferente pero con los que tenés los mismos intereses.

claudia: Seee, los minutos previos a los finales siempre me parecieron iguales, con la seguridad de estar en blanco y de no saber todo lo necesario.

candorosa: Cierto, después las anécdotas que van quedando son las risueñas o las que generaron alegría. Otros para vos!

nadie: Es cierto eso, porque para renegar tuvo que haber interés. Y con respecto a lo de bocasucia, te leo demasiado seguido. Me estás contagiando (jejejeje). Otros Para vos!

ani.: Muchas gracias! realmente esmerado fue (y festejado).

blonda: Puede ser, aunque fijate que en tu caso la carrera significó una inversión favorable en cuanto a la cantidad de amigas. Otro para vos.

je!: Bienvenida! qué grande esa quemera... otros para vos

fuegianboy: Bienvenido! Creo que el tema principal es el estudio y el compartir con el otro, independientemente del palo profesional escogido, y eso en buena parte es lo que extrañamos. Otro para vos!

constanza: También la nostalgia tiene que ver con quienes éramos nosotros y como estábamos en esos años

fer: Qué grande, colega! conozco que a todos nos pasan las mismas cosas en nuestra cursada... otros para vos

erótika: Bienvenida! Gracias por los saludos (y la forma de manifestarlos)

irantzu: Me gustó esa frase, aunque para ser añoranza tenemos que, constantemente, generar algo que se pueda recordar.

r.-: Si don Alejandro supiera las noches de trabajos prácticos en los que nos ayudó a tantos...