De tener oportunidad de viajar, las dos ciudades que primero quisiera conocer son Brujas y Dresde. En ambos casos por motivos históricos. De diferentes sitios en el mundo hay algunos que, creo yo, solamente se me pueden ocurrir a mi.
La sensación de estar en un sitio donde “pasó” algo que está en los libros, me resulta inigualable.
Entre muchos lugares de esta clase, rescato uno en especial
La foto la bajé del Google Earth, se trata del osario de Douaumont. Fue, entre varias otras imágenes, la que mas me movilizó.
El osario se encuentra junto a un cementerio militar. Ambos están enclavados en el lugar donde se desarrolló la batalla de Verdún durante la I Guerra Mundial.
Verdún fue planeada por los alemanes para desangrar el ejército francés. Su duración (21/02/1916 al 11/12/1916) determinó que ambas partes sufrieran pérdidas terribles en cuanto a cantidad de soldados. Al finalizar la batalla las posiciones iniciales prácticamente no habían sufrido gran modificación.
Verdún fue un ejemplo de lo terrible de la guerra de trincheras, las posibilidades de reabastecimiento durante los combates eran muy limitadas y, por supuesto, los reabastecedores eran un blanco buscado por los fusileros de ambos bandos, los obuses removían constantemente la tierra que estaba sembrada de cadáveres cuya evacuación era imposible, de modo que los sobrevivientes combatían, prácticamente, en una fosa común, rodeados de cuerpos en descomposición.
En la actualidad, en la zona se pueden visitar los restos de algunos fuertes, el cementerio y el osario, también hay un templete construido sobre un sitio denominado “trinchera de las bayonetas” del cual hay distintas versiones, se supone que es un grupo de soldados que quedó sepultado en vida cuando los obuses nivelaron la línea de trincheras donde ellos estaban y, al estar los fusiles apoyados en el borde de la zanja, quedaron solo las bayonetas sobresaliendo. De esta forma ubicaron su posición luego de los combates.
El libro “El Húsar” de Pérez-Reverte es una descripción muy buena entre la diferencia que existe entre lo “romántico” de ir a pelear, matar y morir por la patria, el Rey, o quien sea, y lo que efectivamente ocurre en batalla, dado que el protagonista del libro señala que lo que hay es “sangre, barro y mierda”
Verdún significó la muerte de aproximadamente 250.000 soldados y heridas para otros 500.000, se utilizaros cañones, lanzallamas, gases asfixiantes, fusiles, bayonetas, palas, uñas y dientes. Todo fue válido en Verdún.
El osario se construyó para depositar allí los restos de 130.000 soldados de ambas partes qué jamás fueron identificados.
Y la pregunta que puede surgir en alguien es ¿a vos te gustaría visitar ese lugar?
Por supuesto que si, cada loco con su tema. Caminar por Verdún, ver todos esos sitios e internamente sentir “fue acá”
10 comentarios:
a mí me pasa lo mismo, y te recontra juro que es con el mismo lugar. ¿la razón? en una de las selecciones de mi abuelo, había un artículo que se llamaba "navidad en flandes", y relataba cómo en esa batalla, durante la noche del 24, desde una de las trincheras comenzó a oirse un villancico. la batalla se detuvo por unos instantes, los soldados salieron de sus trincheras para cruzar la línea y saludar a su enemigo. si fue verdad, no lo sé, nunca quise comprobarlo, creer que sucedió me hace bien.
Hay quienes estamos signados por historias de guerra. Si tuviera que honrar la memoria de mi familia iría a los fríos bosques de Katyn, donde se cometieron asesinatos de lesa humanidad que el juicio de Nuremberg tuve el buen gusto, para bien de algunos pocos, de olvidar.
Saludos!!
Yo iría a Escocia, no me emparenta mi sangre precisamente, pero si alguna que otra historia de batallas de independencia a puro coraje...
Y tal vez esa fantasía loca que me ronda desde hace muchos años, de que en otra vida...fui escocesa...
Esos lugares en el mundo...
Saludos
algun dia pisare malvinas
Si bien tengo ese "sentir" creo que no es tan fuerte..
Y te cuento una anécdota porque ahora si, puedo entender eso de "fue aca".
Con mi grupo de compañeras del colegio nos juntamos bastante seguido.
Uno de los lugares que hemos elegido varias veces es un restobar que se llama "Rock'n'fellers". Es una imponente esquina cuasi céntrica, enorme y ambientada obviamente hacia el rock. Onda Hard Rock Café.
Ese lugar fue un centro de detención clandestino (y tortura) en los setentas.
Una de mis compañeras, la ultima vez se negó a ir argumentando que le hace muy mal sentarse, comer y tratar de disfrutar de una salida sabiendo todo lo que paso entre esas paredes. Incluso el baño que esta hermosamente decorado, es un sótano donde sabemos que fueron los calabozos. Este lugar estuvo a punto de cerrarse. Ahora no se que pasó.
Y a pesar de haber vivido toda esa epoca con mucha consciencia, siento hoy que es mas fuerte lo hermoso y llamativo del lugar que saber lo que allí paso.
Aunque no tenía mucho que ver con tu post, aunque tambien sea parte de la historia, queria contarlo.
Perdón por la extensión.
Eso si.. desealo fuerte fuerte, el poder estar ahi.. imaginate mirando y sintiendo esos lugares y algún día vas a poder cumplirlo.
Un beso
No, gracias, Hurri. Yo no tengo en absoluto deseos de pisar esos lugares. Demasiada muerte, demasiado sufrimiento, demasiado horror, darle a esos lugares una categoría especial a mí al menos más que honra a los muertos me suena como una eternización de su calvario. Habría que dejar que tanta energía negativa se diluyera lentamente bajo el influjo de la naturaleza. En fin, es lo que yo siento.
Un saludo
Es muy movilizante pensar en todo lo que pasó en algún tiempo en el msmo lugar en donde tus pies pisan, en donde tu vista sólo observa los restos de algo que nunca vio, pero que sabé exitió, e imagina...
La foto es increíble, podrías pasar horas mirándola sin salir del asombro, es realmente preciosa.
Ojalá puedas ir allí, y a todos los lugares que te provoquen esa hermosa sensación de la que hablás.
Besos.
flavia: Está registrado que pasó algo así, hace poco incluso vi una película sobre el tema, y recuerdo que Mc Cartney compuso "Pipas de la paz" basándose en la misma historia.
una pepina: Me diste un dato para investigar, mas tarde voy a ver qué paso donde decís.
la candorosa: Sii, a los pagos de William Wallace. He visto una foto de su espada, que la guardan en un museo.
r.-: Comparto tu deseo, hace poco aquí hubo una fiesta de la aviación, veía volar un Aermacchi, un Dagger y un Super Etendart y me acordaba de tus descripciones y quejas por el estado de nuestra aviación.
araña: Sin dudas nosotros también tenemos bastantes lugares donde poder decir "fue acá" por nuestra historia reciente y la anterior.
ani.: Ok, comprendo tu punto de vista, tené en cuenta que no solo la historia en gral. sino también la bélica me interesa especialmente.
romina: Gracias, la foto realmente me conmovió entre muchas otras, porque sentía que habían dos fuerzas, y que detrás y por encima del horror que simboliza ese lugar está la fuerza de la creación.
Estuve en Douamont en el 2000. No piensen ir sin antes leer sobre el tema. Dejen el Osario para lo último. Primero un café en alguna terraza de la ciudad de Verdún, junto al río. Luego la Citadelle, el fuerte. Allí estaban las tropas de retaguardia. Un trencito lleva por los sótanos enormes del fuerte. Con 33ºC afuera en el tren hay mantas por la baja temperatura de la profundidad. Luego al fuerte de Douamont. En manos francesas y alemanas en alternancias asesinas. Es un fuerte subterráneo,no esperen torres. En la superficie se ven torretas de 75mm y un gran cráter producto de uno de 420mm. Existe una foto con ese cráter y unos soldados marroquíes en su interior. Hoy uno puede estar en ese mismo lugar. En su interior, las galerías, los mandos de los cañones, los dormitorios, la sla de despiojado. Lo más tremendo: una galería se corta abruptamente con un muro de ladrillos, detrás, los restos de 800 alemanes pulverizados por una explosión de la munición almacenada donde estaban. Están ahí. Luego sí, el Osario, construído por un magnate norteamericano. El edificio de la foto, visto de arriba es una enorme cruz y visto de lejos hace temblar las piernas. En las tumbas conviven la cruz cristiana y la luna del islam. Adentro, la inmolación de miles de vidas llevado al expresionismo del mármol. Alrededor del Osario hay caminos permitidos y zonas vedadas, con nuevos bosques, por los explosivos aún presentes. Se puede ver por debajo de los árboles el pasto crecido sobre un terreno ondulado por las bombas. Esa topografía está intacta. Luego, al costado del camino, pequeñas parcelas marcadas en el piso con el nombre de las familias que vivían allí, en lo que había sido su paraíso en medio de un bosque que por años no existió más.
anónimo: Qué descripción!!! gracias por los datos tan interesantes
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