lunes, julio 12, 2010

Un ejemplo

Dio gusto ver a la Selección Uruguaya. Hinché por ellos (además de los nuestros, por supuesto) desde su primer partido contra los franchutes. Mas allá de mi simpatía por los rioplatenses, el ver un grupo que (como bien definió el sábado un periodista) fue consciente de sus carencias para luego potenciar sus virtudes fue estimulante, y debería servirnos un poco a nosotros sobre como encarar algunas etapas del trabajo en equipo.


Lástima la albiceleste, estábamos para mas.

2 comentarios:

GABU dijo...

La actuaciòn de los charrùas en el mundial fue la sorpresa menos pensada...

P.D.:Y nosotros a pesar del soplamoco que nos metieron los Alemanes quedamos quintos,podrìa haber sido muchìsimo peor,no??
Bah,como en los ùltimos 20 añitos digamos...

BESITUS
Y veremos què pasa dentro de 4 años... :/

Mary Reed dijo...

Que lindo! gracias por hinchar por nosotros.

Acá fue tremendo! el pueblo se levantó y salió a la calle.

Nos vestimos de Celeste TODOS!

Y aquí estamos, esperándolos, para darles las GRACIAS por tanta alegría.